Es sabido que el Código
Penal pide a gritos una reforma, por lo inconsistente de su estructura, su
disparidad y deficiente sistematicidad.
Valoramos el trabajo
realizado en la comisión presidida por el Juez de la CSJN E.R Zaffaroni y
conformada por legisladores de distintos partidos políticos (oficialismo y
oposición).
Así las cosas, creemos que es menester la participación de todos los sectores de la sociedad en las modificaciones o reformas de la legislación argentina (entiéndase, reforma del Código Civil, posible reforma constitucional, incorporación del juicio por jurados en la provincia de BS AS, etc). No entendemos al derecho como una ciencia circunscripta a los alcances de la academia, de los doctrinarios, jueces, abogados, juristas o docentes. Rechazamos esta visión elitista que limita la participación ciudadana en discusiones que hacen al cambio en la matriz jurídica.
Así las cosas, creemos que es menester la participación de todos los sectores de la sociedad en las modificaciones o reformas de la legislación argentina (entiéndase, reforma del Código Civil, posible reforma constitucional, incorporación del juicio por jurados en la provincia de BS AS, etc). No entendemos al derecho como una ciencia circunscripta a los alcances de la academia, de los doctrinarios, jueces, abogados, juristas o docentes. Rechazamos esta visión elitista que limita la participación ciudadana en discusiones que hacen al cambio en la matriz jurídica.
Queremos sincerar, más
allá de las críticas, nuestra alegría al poder ver en el anteproyecto de
reforma del CP ciertas muestras de la intención de reducir y contener el poder
punitivo (que se manifiesta de manera irracional y es selectivo en su
aplicación). Creemos que la posibilidad de aplicación de penas alternativas,
como ser la pena de multa con un fin retributivo, muestran una diferencia con
el Código Penal hasta ahora vigente, ya que se vuelve a contemplar a la víctima
que sufrió la lesión al bien jurídico (desplazada hacia un costado por el Estado
con el surgimiento del derecho penal). Más teniendo en cuenta que la víctima no
percibe ningún beneficio al aplicársele al sujeto activo del delito una pena
privativa de la libertad, salvo que pensemos al derecho en términos de venganza
y aboguemos porque el que cometió un delito "se pudra en la cárcel".
En este sentido, es
clara nuestra postura, y aquí nuestra crítica al anteproyecto o nuestro
sentimiento de que pudo haberse hecho más. Pues, aunque se establecen penas
alternativas, no nos parece significativa la reducción en las penas que se han
establecido en distintos delitos (hurto, robo, etc). Decimos esto porque
estamos convencidos de que la pena privativa de la libertad no ha encontrado en
la historia eficiencia alguna. Sabemos que la cárcel no cumple con la función
establecida de reinsertar, reeducar, resocializar a los internos y que lejos
está de ser "sana y limpia para la seguridad de los reos" como dice
la CN.
A nadie se le puede
enseñar cómo vivir en libertad, encerrado. Somos firmes en esta postura. El
sistema penal no genera sino más violencia, las cárceles reproducen la
violencia social, no solo intramuros (entre los privados de su libertad y por parte
del servicio penitenciario) sino en el afuera. Por ello, creemos que las
problemáticas sociales no se solucionan tras los paredones de una unidad
penitenciaria de máxima seguridad, pues tan sólo se las llega a invisibilizar.
Aunque desde el gobierno nos traten de convencer de que este es un "código abolicionista", en su afán por intentar conservar su discurso progresista (imposible de mantener luego de las últimas medidas económicas), muy lejos está de ser una expresión del abolicionismo penal, a nuestro pesar.
Aunque desde el gobierno nos traten de convencer de que este es un "código abolicionista", en su afán por intentar conservar su discurso progresista (imposible de mantener luego de las últimas medidas económicas), muy lejos está de ser una expresión del abolicionismo penal, a nuestro pesar.
Coincidimos sí, con
algunas de las modificaciones que se realizan en la parte general: la incorporación
expresa de principios tales como el de humanidad, el de ofensividad o el de
proporcionalidad resultan oportunos y más aún si tenemos en cuenta que son
fundamentales a la hora de entender a nuestro código como lo que es: una simple
ley que tiene encima a nada más y nada menos que la Constitución y los Tratados
Internacionales de Derechos Humanos con jerarquía constitucional. Por ello es
también que celebramos que se plantee en el anteproyecto la eliminación del
instituto de reincidencia, justamente por su ya demostrada
inconstitucionalidad.
Concordamos además con
las atenuantes que se incorporan para el cómputo de la pena: ser menor de
veintiún años o mayor de setenta al momento del hecho; las circunstancias personales,
en especial la miseria y también las circunstancias que se plantean para la
exención de la pena (la insignificancia por ejemplo).
El uso y manoseo que han hecho a la reforma del código penal los sectores de la derecha argentina que pretenden quedarse con el gobierno en el 2015 (Mauricio Macri y Sergio Massa) es obsceno y detestable. Esta ley hay que discutirla enserio, con el tiempo que merece y abriéndolo a la comunidad en general.
El uso y manoseo que han hecho a la reforma del código penal los sectores de la derecha argentina que pretenden quedarse con el gobierno en el 2015 (Mauricio Macri y Sergio Massa) es obsceno y detestable. Esta ley hay que discutirla enserio, con el tiempo que merece y abriéndolo a la comunidad en general.
Si se aprueba el
anteproyecto, más allá del avance que viene a significar en muchos
terrenos, vamos a seguir teniendo un CP
conservador, donde, entre otras cosas, la mujer sigue siendo penalizada por
decidir sobre su cuerpo al practicarse un aborto, donde las penas de los
delitos contra la propiedad siguen siendo elevadas en consideración a otros
delitos y donde sigue dándosele lugar a la pena de prisión preventiva,
instituto que viene a romper con toda idea de debido proceso.
Comisión de Derecho
Crítico
Próximo CED
Próximo CED
No hay comentarios:
Publicar un comentario